Pero cuando nosotros nos acostumbramos a una persona, nos parece imposible visualizar nuestra vida sin su presencia, no vemos un futuro claro, nos sentimos débiles.
Es duro depender de alguien, porque nadie te asegura que va a estar siempre en tu vida, aunque en realidad es lo que inconscientemente buscamos, tener a alguien con quien compartir la vida alguien a quien contarle nuestro día a día, que nos cuente el suyo y que nuestros planes siempre sean los mismos. 
Es obvio que no vamos a querer estar solos, el hombre por naturaleza busca la felicidad en las personas. Pero yo he aprendido que si antes no te quieres a ti mismo, nunca vas a querer a alguien de verdad y menos aun te van a querer como tienen que hacerlo. 
No hay comentarios:
Publicar un comentario